Para dar la bienvenida al verano y conseguir un bronceado uniforme la piel necesita un cuidado extra.
Es importante mantener una piel hidratada durante todos los meses del año, pero en primavera y sobre todo en verano, la capa que cubre todo nuestro cuerpo está expuesta a agentes externos como el sol o el viento de manera mucho más directa.

Las Mantecas de Karité son una de las opciones naturales indicadas para regenerar, calmar, hidratar y nutrir la piel. Nuestras mantecas son originales de África y están producidas por una cooperativa de mujeres en Burkina Faso, quienes, aparte de su papel importante en la extracción del producto, también son las responsables de un proceso significativo de empoderamiento de la mujer en su entorno.

Cada una de las mantecas está compuesta por diferentes aceites esenciales con el objetivo aportar propiedades específicas: Regeneradoras, Calmantes y Ultranutrivitas y conseguir una buena barrera protectora. Son capaces de transformar una piel desvitalizada y seca en una piel más fuerte y saludable.

La Manteca de Karité incrementa la hidratación de la piel del cuerpo y del  rostro de forma progresiva y también puede aplicarse en el cabello para hidratar y cuidar las puntas.

¡Un imprescindible en la rutina diaria!